Escases de sabiduría
proverbios 8:11 dice: “porque mejor es la sabiduría que las perlas,
y no hay cosa deseable que se le pueda comparar”. He visto un mal que está destruyendo al pueblo de Dios es la falta de sabiduría y discernimiento. Dice la palabras mi pueblo padeció porque le falto conocimiento. La sabiduría y el discernimiento son vitales para reconocer las artimañas y las trampas del enemigo. El discernimiento lo da el Espíritu Santo es la capacidad para diferenciar entre lo malo y lo bueno entre lo falso y lo verdadero. La sabiduría proviene del conocimiento de la palabra, el cual nos da la habilidad de reconocer cuando alguien quiere añadirle o quitarle a la palabra, es decir torcerla para usarla a su conveniencia. La sabiduría nos ayuda a tomar mejores decisiones para nuestras vidas y la de los demás. ¿Cómo adquirir sabiduría y discernimiento? simplemente pidiéndoselo a el Padre el cual nos la dará sin medida y sin límites. También estudiando la palabra meditándola, memorizándola, recitándola. La palabra de Dios puede convertir a una persona inculta en la persona más inteligente y esto es comprobado ya que ha habido grandes hombre de Dios que nunca han estudiaron pero el conocimiento de la palabra le ha dado tremenda sabiduría. La sabiduría divina vale más que oro y plata, más que todos los títulos universitarios que una persona pueda adquirir en este mundo. El hombre sin sabiduría y discernimiento es como las olas del mar las cuales el viento las lleva y la trae, muchos son como las olas del mar llevados por todo tipo de doctrinas. Hoy en día Satanás se viste de ángel para engañar hasta los mismos elegidos con todas estas doctrinas falsas que han surgido en estos últimos tiempos. Siervo de Dios cíñete con la sabiduría divina y usa el discernimiento, búscalo como el agua que sacia tu sed, pues te servirán para reconocer las mentiras del enemigo.