Hebreos 3:15
Entre tanto que se dice: Si oyereis hoy su voz,
No endurezcáis vuestros corazones, como en la provocación.
Porque hay tantas personas que no creen en Dios? es por el
endurecimiento de sus corazones que es
una consecuencia directa del pecado lo cual
nos lo lleva a la incredulidad. El corazón se endurece mientras más cabida
les damos al pecado, nos a acostumbramos a vivir así, y sucesivamente entramos
en el terreno de la incredulidad. Quizás
a ver que pecamos y nada sucede empezamos a endurecernos más, y más antes la
verdad. Tal vez si Dios nos mandase un castigo inmediato
entendiéramos la consecuencia del pecado. Pero Dios no es un dios que manipula,
y controla él nos da la opción de que nosotros podamos darnos cuenta de las
consecuencias del pecado Y que por nuestra propia decisión cambiemos ruta .
Esto le sucedió a muchos de lo que no pudieron entrar a la tierra prometida
murieron en el desierto. Se endureció su corazón y se llenaron de incredulidad.
Mas no pudieron entrar en el reposo del
señor. La verdad es, que el corazón se va endureciendo más, y más cada día
cuando habitualmente permitimos el pecado
en nuestras vidas y ese endurecimiento
nos lleva la incredulidad. Quizás al no ver el juicio de Dios inmediatamente en
nuestras vida y hay poder gozar por un buen tiempo de los beneficios del pecado
sin tener consecuencia nos endurecemos más, y más y nos volvemos más
incrédulos. Dios le permitió al pueblo de Israel en el desierto que
durarán bastante tiempo pero al final
recibieron la retribución por su incredulidad. Por esto la palabra dice que si
hoy escucha la voz del espíritu Santo que no endurezcas tu corazón porque
mientras más tiempo pasas negando a Dios
más te endurece. Tanto el
cristiano, como el no creyente rechazar
la voz del espíritu Santo y la
convicción nos lleva a las ceguera
espiritual y eso nos lleva a endurecernos, y a la incredulidad. El pecado es mortal, y al ser engañados por el pecado empezamos a entrar en
el terreno de la comunidad donde ya no sentimos cómodos con nuestro pecado, no sentimos esa convicción y
nuestro corazón empieza a endurecerse por eso vemos personas en las
iglesias que cuando se le predica la verdad no le gustan esos mensajes, ya no quieren escuchar mensaje
sobre el pecado, y sus consecuencias, el infierno porque su corazón se
endureció y entran en un terreno de incredulidad. Ya no creen que puede existir el infierno, o castigo
por el pecado y por eso se amontonan para ellos mismo predicadores
que les prediquen mensajes positivos
sobre el éxito ,y la bendiciones de Dios
no sabiendo que todas esas cosas se tienen por medio de la obediencia, y el practicar la palabra. Tenemos que tener
mucho cuidado porque estamos viviendo en una era en la cual el amor de mucho se
ha enfriando y hay muchos cristianos engañado, y segados por el pecado dentro de las iglesias,
personas que aun sabiendo la verdad escogen caminar en pos de su propias creencias, emociones, y
desechan la verdad aun sabiendo que lo que están haciendo es incorrecto y no es
aprobado por Dios . Pero lamentablemente deciden caminar en pos de sus
sentimientos y callan la voz del
espíritu, y su corazón se va
endureciendo Y se vuelven más incrédulo. Estamos vivirnos en tiempos donde no podemos permitir pecado
en nuestra vida, tenemos que santificarnos, apartarnos, y guardar nuestro
corazón de la incredulidad, el engaño del pecado. Mantenernos alerta, vigilando, porque nuestro Señor va
regresar por su iglesia pero aquel que esté caminando en incredulidad, en
desobediencia a la palabra se va quedar. Esto no es un juego esto es algo muy
serio y muchos se han vuelto incrédulos dentro de las iglesias y esa raíz viene
por medio del pecado porque según vamos a permitiendo el pecado nuestra vida
nos vamos acostumbrando y entramos en la complacencia y vamos quedando ciegos
ante la verdad, e incrédulo ante el
evangelio. Hay muchos motivos por los cual podemos caer en la incredulidad y
como mencionamos anteriormente uno de los mayores motivos es simpatizar con el
pecado lo cual significa apoyarlo, aceptarlo, y permitirlo. Aceptar el pecado y
comprometerse con el pecado nos lleva a que nuestro corazón se endurezca ante
la verdad. Hay muchos que lo aceptan, lo permiten, y participan no solo en sus
propios pecados también en los pecados
de otros lo que se define como
comprometer la fe. También hay otro de
los motivos que no lleva la incredulidad y el endurecimiento del corazón, y uno de ellos es la falsa doctrina muchas
personas conocen la verdad saben lo que la Biblia dice y se quedan en iglesias
donde saben que se han salido del contexto bíblico, iglesias donde no hay
unción , ni mover del Espíritu. Déjame que si tú estás en una iglesia muerta
espiritualmente donde se han salido del contexto bíblico donde se permite el
pecado eso te va matar a ti espiritualmente. Porque tú estás recibiendo eso en
tu espíritu. Y al empiezan a escuchar la
mentira, y el engaño poco, a poco eso lo va endureciendo tu corazón y se abre
la puerta para la incredulidad ante la verdad, porque se aceptó la mentira como
si fuese la verdad. Otros de los tantos motivos porque entramos en el terreno
de la incredulidad es ser desagradecidos con Dios hay muchos cristianos que se
quejan de su estado actual. No son agradecido con Dios por lo que le ha
dado. Constantemente se están quejando, mirando
al otro para ver lo que tiene y saber si más
bendecido pero no entienden que el otro es obediente, agradecido y que aunque no tenga nada siempre vive con un
corazón agradecido. Esto le pasó al
pueblo de Israel aun Jehová estaba alimentando en el desierto decían que
preferían volverse a Egipto a comer de
la comida que tenían en Egipto pues era mejor que la del desierto. Todo sabemos
que comían ellos en Egipto se quejaban
le decían a Moisés para que nos trajiste al desierto?
Mire la mentira que creyeron a causa de la de abrir la puerta a la queja, y al desagradecimiento. Por esos mucho se endurecen, y empiezan a caer en ese terreno de la
incredulidad. Muchos también caen en la
incredulidad porque son de doble ánimo lo cual
es una de las causas que también endurece el corazón y nos lleva a la
incredulidad. Porque la persona de doble ánimo es inconstante en la fe nunca
echa raíces profundas en su fe si trata algo y no le funciona ya no creen eso y
busca una nueva alternativa y esto va cada día endureciendo el corazón ante la
verdad. Mi amados tenemos que tener mucho cuidado pues es fácil abrir la puerta
a la incredulidad aun confesando que somos cristianos, y esto tiene consecuencias
devastadoras para nuestra vida espiritual. Uno de esos resultado es no poder entrar en el reposo del señor. Que no veamos lo milagro del señor en nuestras vidas. Jesús fue a un lugar y por causa de la
incredulidad de las personas ni pudo allí muchos hacer milagros. Mateo 17:17No endurezcáis vuestros corazones, como en la provocación.
Respondiendo Jesús, dijo: !!Oh generación incrédula y perversa! ¿Hasta cuándo he de estar con vosotros? ¿Hasta cuándo os he de soportar? Traédmelo acá. Dice la palabra que le dios de este siglo ha cegado el entendimiento y está causando que se endurezca los corazones ante la verdad. La incredulidad causa que Dios no tenga confianza en nosotros, y no pueda entregarnos esas promesa que tiene para nosotros. Guardemos nuestros corazones de la incredulidad no permitamos que el pecado, la avaricia, el doble ánimo, y el desagradecimiento endurezcan nuestros corazones y empecemos a dudar de Dios. Dice la biblia que ni los cobardes, ni los incrédulo entraran al reino de Dios. Guardémonos de todo lo que pueda endurecer el corazón y nos lleve a ser incrédulo porque para agradar a Dios hay que tener fe y creer que él es un galardonador de aquellos que en el confían.